A y O
La «a» y la «o» tienen mucho en común:
La «a» envidia a la «o» por su simplicidad, y la «o» a la «a» por su versatilidad.
La «a» y la «o» tienen mucho en común:
La «a» envidia a la «o» por su simplicidad, y la «o» a la «a» por su versatilidad.